Con la llegada del buen tiempo, siempre apetece dar un paseo por la Barceloneta (excepto en San Juan) y de repente nos encontramos con esta gran terraza, al solecito. Pese a que la terraza es grande esta llena, pero no os preocupeis, la cola va rápido.
Una vez conseguida la mesa, hay que decidir que comer, y nosotros optamos por la opción más sencilla, ensalada y bocatas. La carta es principalmente platos clasicos italianos y los bocadillos también: verduras asadas, jamón serrano con rúcula y parmesano, jamón york y queso, y algunos más. Nosotros nos pedimos los dos primeros y estaban realmente buenos, con el pan calentito y bien de tamaño. La ensalada griega muy buena y completa. Y de precio muy razonable.
Pero lo que mas nos sorprendió del Santa Marta fue la gestión del manager italiano y la historieta de la que fuimos testigos. Unas chicas estaban sentadas al lado nuestra disfrutando del solecito acompañadas del perro de una de ellas. El animalico empezó a ladrar insistentemente cada vez que pasaba alguien cerca. El manager primero bromeo con las chicas sugiriendo de que callaran al perro, y despues de unos minutos de ladridos intensos el manager pidió a la dueña del animal que por favor se marchara y permitiera que el resto de personas en la terraza pudieramos disfrutar de la calma y la tranquilidad sin ladridos de perro. Bravo bravo bravo!!!
Lo dicho, a disfrutar de la tranquilidad del Santa Marta!
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